El término “calendario” proviene del latín “calendas”. En su origen etimológico significa “llamar”. Los antiguos Pontífices romanos anunciaban con este vocablo el número de días hasta el próximo mes. Parece alejado en el tiempo, sin embargo, ha vuelto a nuestras vidas con el afán no de ser instrumento que nos dote de una organización, sino en el más ruin de coartar la libertad y someter al ciudadano a un agradecimiento por el simple hecho de algo tan elemental como es, disfrutar de la libertad.
Los nuevos y falsos Pontífices de hoy, desde sus púlpitos basados en pilares democráticos que usan para satisfacer sus propios intereses, llaman a las nuevas “calendas” o “fases” de 15 días, para otorgarnos un poco más del principio básico de libertad. Pero la libertad no se concede y tampoco se gana, la libertad se tiene y es nuestra. Debemos defenderla y luchar por ella y no caer en la trampa de agradecerla. Llegó la hora de ser valientes y de luchar por lo que “de facto” y de forma irrenunciable, pertenece al ciudadano.
El pueblo español incansable a lo largo de la historia siempre ha sabido imponerse y vencer a todos aquellos que; o bien, desde el interior del Estado; o bien, desde fuera, le han querido arrebatar su libertad. Una vez más, lo estamos viendo, España despierta y sus ciudadanos están decididos a no agradecer las nuevas “calendas”, pues es España un país de “valientes”.
¡Ya está bien, ha llegado la hora! No podemos seguir sometidos y tener que agradecer lo que es nuestro. Nuestra libertad tiene que ser defendida con valentía. La libertad reside en nosotros y en lo que nosotros representamos, que es España. Debemos defender nuestra Patria de los nuevos Pontífices y con ello, hacernos de nuevo con el poder de las “calendas”. Llegó la hora de los valientes y de echar a los que coartan sus libertades. Nuestra obligación es hacerlo, no solo por nuestra libertad y nuestra patria, sino también por la memoria de todos aquellos que han muerto, a los que han arrebatado su libertad para siempre.
Seamos valientes, no nos dejemos engañar ni mostremos agradecimiento por algo que es nuestro. Luchemos por defenderlo o perderemos nuestra libertad para siempre y con ello, nuestra querida España. Seamos valientes y no tengamos complejos, nos jugamos la libertad heredada de nuestros mayores. Reclamemos desde la razón a nuestros compatriotas el ejercicio de los principios democráticos que deben imperar en los países desarrollados. Abandonemos las políticas de recorte de libertades y compra de voluntades políticas, para acercarnos cada vez más a las economías de países desarrollados en donde priman políticas de desarrollo económico sostenible en beneficio del estado del bienestar. Huyamos de las políticas cortoplacistas dictadas por estos nuevos y falsos Pontífices, reclamemos lo que es nuestro, impidámosles la demagogia y defendamos España desde los principios, pues si no lo hacemos, terminaran por destruirla.
Llegó la hora de los valientes. Es hora de fijar definitivamente el calendario de la libertad para esta gran nación que es España.
9 de Junio de 2020.